Originalmente publicado en inglés por Arielle Mensch
Publicado el 10 de agosto 2018
Traducio por Mariah Dooley; editado por Curtis Green
Hace casi 4 años ya (wow me estoy envejeciendo) escribí un artículo en el blog sobre los restos invisibles de cosas muertas escondidas en el agua llamada materia orgánica natural o NOM. Bueno, algunos colegas y yo recientemente publicamos un nuevo artículo titulado «La concentración de materia orgánica natural afecta la interacción de las nanopartículas de diamante funcionalizadas con membranas bacterianas modelo y reales»1, en el que presentamos algunos de los experimentos iniciales que discutí en mi blog anterior y aprendimos algunas cosas realmente interesantes en el camino. Nos propusimos comprender el impacto que la NOM puede tener sobre las propiedades de los nanomateriales, y luego cómo cualquier cambio inducido por la NOM a los nanomateriales puede afectar la forma en que interactúan con las bacterias. Déjenme explicar lo que quiero decir:
NOM es una colección de productos de descomposición de seres vivientes (animales, plantas, etc.) y sus desechos (heces, hojas, etc.). Debido a que está compuesto de materia orgánica, se compone principalmente de hidrógeno, oxígeno y carbono, pero no dejes que te engañe: la NOM es muy compleja. La estructura molecular exacta de NOM es desconocida y depende del entorno del que proviene. NOM en cierta cantidad se encuentra en todos los entornos que te puedas imaginar. En nuestros estudios utilizamos la NOM que obtuvimos del río Suwannee en Georgia, que es estándar para la Sociedad Internacional de Sustancias Húmicas (IHSS) (para más información sobre esta organización, pulsa aquí). Este río en particular fue elegido como estándar por el IHSS debido a la alta concentración de NOM en el río y al impacto humano relativamente bajo en esta área.

Figura 1. Yo pasando un rato junto al río Suwannee, técnicamente en Florida. (Foto del Dr. Jack Tilka)